En pleno verano y con el calor apretando, es difícil no pensar en lugares con aguas frescas y cristalinas donde uno poder refrescarse. Hoy te traemos una selección de las 12 mejores piscinas naturales de España.
1. Fontcalda (Tarragona)
Fontcalda es una bonita playa interior ubicada en la localidad de Gandesa, perfecta para los más frioleros ya que sus agua medicinales alcanzan una temperatura de 28º.
Conocidas como la Fuente de los Chorros y encajadas entre las sierras de la Mola y Crestall, las aguas de este manantial son famosas por contener sulfato magnésico, clorur sódico y carbonato cálcico, entre otras propiedades.
2. Aniol d’Aguja (Girona)
Los que prefieren bañarse en aguas más frías pueden visitar el Gorg blau de Sant Aniol (Girona), un salto de agua que acoge una refrescante piscina natural a sus pies.
La poza refrescante del Gorg blau es un estímulo permanente para los viajeros que se deciden por el senderismo en la comarca. La ruta para llegar hasta aquí es un atractivo en sí mismo por la historia local con sus leyendas y el entorno natural.
3. Los Charcones (Lanzarote)
Las maravillosas piscinas naturales de Los Charcones se extienden por la franja suroeste de Lanzarote, a apenas dos kilómetros al norte del Faro de Pechiguera. Alejadas del bullicioso núcleo turístico de Playa Blanca y de sus pobladísimas playas, perderse en cualquier plato natural de mar resulta una poderosa carga de pilas.
4. La Garganta de los Infiernos (Cáceres)
La Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos se encuentra en el Valle del Jerte, entre la Sierra de Tormantos, la vertiente sur de la Sierra de Gredos y el río Jerte.
El entorno de la Garganta de los Infiernos es precioso y de una gran riqueza natural, con numerosos saltos de agua y cascadas en sus innumerables arroyos y riachuelos que forman una red de afluentes sobre la garganta principal, que vierte finalmente sus aguas al río Jerte
5 Gulpiyuri (Asturias)
Gulpiyuri es una de las piscinas más espectaculares del norte de España. Es conocida como la más pequeña del mundo, apenas 50 metros de playa. La posibilidad de baño depende de las mareas,a veces, con marea baja, el agua desaparece y en otras ocasiones, con mareas vivas, el mar la inunda y llega a lamer la hierba ya que el agua salada entra desde el mar a través de un conjunto de cuevas subterráneas.
6. Pou Clar d’Ontinyent (Valencia)
El Pou Clar es el paraje fluvial más importante del municipio y alberga importantes valores naturales y paisajísticos. El río Clariano nace allí y es el responsable de las piscinas naturales de Pou Clar.
7. Arenas de San Pedro (Ávila)
Las piscinas naturales se sitúan en la carretera del Hornillo (Av-p-711) en pleno cauce del río Arenal.
La piscina grande tiene escalerillas, duchas e incluso un trampolín. Pero como se trata de una piscina natural, encontraréis una sorpresa: las truchas del río, que comparten la piscina con los bañistas. El agua está tan limpia y clara que podréis verlas nadar al vuestro lado.
8. Piscinas naturales de Rascafría (Madrid)
Las Presillas son las piscinas naturales de Rascafría, junto al cauce del río Lozoya y con unas espectaculares vistas del Pico Peñalara.
Un lugar ideal para pasar en familia o con amigos durante los meses de verano en la Comunidad de Madrid.
9. Fuentes del Algar (Alicante)
Este bonito paraje natural a unos 15 kilómetros de Benidorm, en Callosa d’en Sarrià, encontrarás el lugar perfecto donde apartarse del bullicio de la ciudad. Gracias a sus cascadas y tolls (remansos de agua o piscinas) de aguas en tonos turquesa en las que darse un buen baño tras realizar alguna ruta medioambiental por esta Zona Húmeda Protegida.
10. Las Chorreras (Cuenca)
En Cuenca, en el término de Enguídanos, encontrarás el lugar conocido como Las Chorreras, en el curso del río Cabriel.
El paraje se ha definido como “un caos de saltos y cascadas, cuevas laterales y pozas de color esmeralda al pie de espumeantes rabiones salvajes”
11. Piscina natural de Letur (Albacete)
Las piscinas naturales de Letur, en Albacete, son un espacio de tradición árabe-medieval donde se puede «ver y escuchar» el agua. El agua del arroyo de Letur es el que alimenta estas piscinas naturales, que nace entre las sierras de los Estepares y de la Umbría de Mata a unos 1.100 metros de altitud por lo que sus aguas están muy frías.
¡Una opción perfecta para combinar una visita refrescante y cultural a su vez!
12 Termas de Outariz (Orense)
A orillas del río Miño y a lo largo de cuatro kilómetros podemos encontrar un precioso circuito termal al aire libre. Las Pozas de A Chavasqueira, Muiño das Veigas, Outariz y Burgas de Canedo están repletas de aguas que brotan del interior de la tierra a más de 60 grados de temperatura.
Gracias por el post, lo comparto!